Blog creado con el fin de ser un compendio de las Notas Destacadas presentadas por los participantes en el Panel de Kimbanda.

viernes, octubre 20, 2006

La Aruanda

La palabra Aruanda es sólo una corrupción idiomática de lenguaje kimbundo, probablemente derive de “a Luanda”, es decir “nuestra tierra de origen”. Casi seguro que el neófito preguntaba al iniciador por el origen de sus divinidades, y se le contestaba “vieram da Luanda”. El remitir los orígenes y fundamentos a la tierra natal o al puerto de partida, San Jorge de Luanda, ciertamente no sorprende. Métraux señala en su obra “Vaoudou” que inquiere a la mambo Lorgina Delorge, sacerdotisa haitiana del ritual vodun. “¿De dónde provienen los loas? La mambo responde como con sorpresa ante tamaña ignorancia: ¿Cómo de donde vienen?. Ellos vienen de Guiní (Guinea ecuatorial),viven en Guiní.?”. Los griegos establecían sus divinidades en el monte Olimpo, y los incrédulos decían que allí no había palacios ni residencias idóneas, pero…moraban en el Olimpo.
Los germanos llamaban Walhalla a la residencia de sus divinidades, un territorio ni espacial ni temporal. Nuestros bantúes llamaban Luanda, Ruanda, Aluanda, Aruanda a ese lugar más espiritual que físico que albergaba a sus númenes.
Las cantigas de caboclos en el ritual umbandista, fijan también en la memoria esa palabra, que no es un determinado terreno como las fuentes del Cariri o tampoco un hecho histórico-epicizado como la batalla de Humaitá en la guerra de la Triple Alianza donde Ogún peleó por Brasil, claro, como el Cid lo hacía por Alfonso VI de Castilla y Roland por Carlomagno.

Aruanda es pues el lugar de residencia de las entidades afroamerindias. No las africanistas, los orisha, que son cultuados como señores feudales en Ile Ife, Keto, Oshogbo, Ire, Ondo, Ekiti, Remò, etc. Los orisha de Umbanda residen pues en Aruanda. Hasta hace sólo unos pocos años, así eran designados los altares escalonados donde convivían las imágenes de santos asimiladas a los orisha africanos con imágenes de caboclos y pretos velhos. El lugar físico era así identificado como una ruptura de nivel sacromágico en la que se hacía evidente la hierofanía afroamerindia.
Cuando Eshu evolucionó a partir del culto umbandista separándose con madurez para crear un ritual complementario, una ley, el término Aruanda pasó a designar su residencia personal. Técnicamente toda casa de Kimbanda -como se llama habitualmente a la ley del ritual Eshu- posee dos Aruandas, una dentro del recinto y otra fuera. Este hecho significativo aparece como un paralelismo entre el Batuque, donde Bara Eshu orisha balancea la energía movilizadora desde dos frentes, afuera y adentro, y la Kimbanda, que absorbe sin ambages aspectos del culto original, tanto como nomenclatura derivadas de la Umbanda.
El Eshu que trabaja en Umbanda posee rasgos que se desenvolverán más acabadamente en la Kimbanda. No obstante su presencia es diferente ya desde el punto de vista físico, cumpliendo tareas más serviciales y puntuales en el encerramiento de las sesiones de trabajo. Ya en la Kimbanda, Eshu alcanza una nueva dimensión y su trabajo es valorado de forma diferente. Actúa con soltura y dignidad asumiendo el rol de caballero o dama que el caso requiera, con menor o mayor afectación, pero siempre con el tenor de un espíritu evolucionado que lo acerca más al arquetipo africano y a la vez lo diferencia del orisha del que se desprende su energía como la fruta del árbol.
Señalemos que esas diferencias y similitudes no son pertinentes en este trabajo y cada quien, si no las conoce debe preguntar a su jefe. Sólo diremos que al tomar un vaso de agua pocas veces nos detenemos a pensar que el agua viene del río. A buen entendedor…
Eshu pues demuestra claramente signos de evolución. Recordamos con afecto los comentarios sorprendidos acerca de los zapatos. Imagínense veinte años atrás, porque la Kimbanda como hoy la conocemos, sólo tiene dos décadas. Babalorisha y Iyalorisha compatriotas, de muchísimo prestigio, se hacían cruces azorados con todo lo que se escuchaba. Y todo lo que se agrandaba porque “me dijeron que le dijeron a N.N. que en la casa de N. un Eshu ¡con sombrero y zapatos! dejó la caña por el whisky con hielo y bailaba delante del tambor”… Sí, amigo lector, todo eso se dijo y redijo y criticó. Y hubo quien juró que en su casa nadie vería jamás tamaño “desaforo” y tuvo que hacer gárgaras con el juramento y abrir su cabecita y preguntar y hacer su camino porque los tiempos vienen más rápido que antes, y corre a aprontarte, que si no te quedás sin gente. Ir y venir a Porto Alegre; que si piedra, que si hierro, que si vulto, que si chivo, que si novillo, que si…, que sí, claro, que ilustrísimos, notables y competentes aceptaron y aceptan ya casi sin renuencias el hecho cierto que guste a quien guste o no guste, el chiquilín de la limpieza se convirtió en un dandy y cambió -para bien, como siempre que se cambia- el gruñido y el torvo carácter por la radiante carcajada y el hospitalario savoir faire de la magia de salón.
Pero que nadie se engañe. No se trata de capas y de copas la cosa. La Kimbanda es una cosa seria, como diría Moab Caldas, para gente seria. Lo que se ve puede parecer un festejo social, pero lo que se mueve sobre lo que se ve, y a veces se ve mientras se mueve, es energía pura. Energía de Eshu, el comunicador, el transmutador, el compadre del hombre mientras el hombre mantenga en pie los términos del contrato, mientras fluya entre los planos del astral el entendimiento.
La Aruanda física es un local con puerta donde reside Eshu en sus diferentes manifestaciones, hombre o mujer, ocupando puestos específicos en el control del astral. Allí están sus ajobó, es decir, los asentamientos de los varios centros de energía que conocemos con el nombre de Eshu o Elegbaras. Este asentamiento es un recipiente cuyo centro -llamado comúnmente “nido” o directamente en portugués “ninho”- alberga el fundamento de ese elegbara particular. Los hay asentados en piedra -otá en yòrùbá-, en vulto, esto es en la imagen de yeso que lo representa; y también en hierro, ya que su “ponto riscado” pasado a este material es una verdadera imagen de su poder mágico más que una firma o emblema. Es su palabra misma, el fundamento de su ley. Los hay combinados, otá y ferramenta, y en todos los casos son acompañados por instrumentos de trabajo tales como ponteiras, facas, monedas, cuernos de bovinos rellenos de secretos, “mironga de compadre”, etc.
Como Eshu opera en todos los planos de la Naturaleza, al ser guardián de los caminos tanto horizontales como verticales, se asienta con elementos de los tres reinos: mineral, vegetal y animal.
a) Del reino mineral: utiliza hierros, ponteiras, garfos, monedas, mercurio, cristales, vidrio, aguas y tierras varias.
b) Del reino vegetal: utiliza bebidas destiladas, tabacos, ataré (pimientas), frutas, verduras, aceites, especialmente de dendé.
c) Del reino animal: obviamente, los animales a él dedicados, tales como gallos, gallinas, palomas, cabras, chivos, y elementos de trabajo como carnes provenientes de otros animales que no le fueron ofrecidos en su ley.
Finalmente señalemos que el fuego está presente en las velas que se encienden en su honor, así como en la pólvora que se quema para descargar.
Como su número cabalístico es el 7, representación cabal de la completud humana, al erigir una aruanda se emplean a vía de ejemplo: siete clases de tierra, aquí entran las de encrucijada, plaza, mercado, institución bancaria, hospital, etc.. Siete clases de aguas, tales como de mar, río, lluvia. Siete metales o limaduras, como hierro, cobre, oro, plata, mercurio -este representa su movilidad, capacidad de cambio y adaptabilidad-. Siete bebidas, por ejemplo whisky, cognac, caña, ron, sidra, vino, licores.
Esta descripción vale a modo de ilustración para el lector no iniciado en Kimbanda, y por supuesto no tiene la completud necesaria ni el orden en que se va asentando cada material ya que el hacerlo bien es responsabilidad de cada quien con su iniciador. Estamos lejos de estimular el “hágalo Ud. mismo” si realmente no lo sabe hacer. Recordamos hasta el cansancio que todo absolutamente tiene un efecto, así que si el lector quiere servir a Eshu, primero debe prepararse. Si quiere hacerle un agrado y no sabe cómo, primero busque una casa de Kimbanda. Si no encuentra una que le satisfaga plenamente, entonces diríjase a una encrucijada tranquila, lleve una ofrenda bien simple, como un cigarro, enciéndalo, dé tres bocanadas y con respeto háblele a Eshu. Pida lo que necesita y ofrezca volver a ese lugar una vez realizado el pedido para agradecer con un regalo de mayor consideración. Deje el cigarro encendido, vuelva por su camino con confianza, porque Eshu le escuchó. ¿No es acaso la encrucijada su oficina?.
Pero una vez cumplido el pedido a su satisfacción, vuelva en serio al lugar en el que despachó la petición y con el regalo prometido. Quien cumple es oído en otra ocasión. Recuerde que Eshu es juguetón y más vale que usted no sea su juguete por haber faltado a su palabra.
Dentro de la Aruanda se efectúa el trabajo esotérico de Eshu; es decir, el reservado únicamente a sus cultores y a ellos mismos cuando se encuentran corporizados. Ofrendas, bandejas con comidas votivas, o servicios en los que se despliega el conocimiento ancestral de los elementos mágicos que “mueven” la energía de los elementales. El trabajo exotérico -es decir, público, abierto- es el que puede verse en un ritual de Kimbanda, ese que a menudo se confunde con una fiesta social. Eshu danza incorporado y canta; en esa acción está también presente la magia, movilizando, poniendo en acción todo un universo de fuerzas para lograr un objetivo. El lector poco avisado o no familiarizado con los cultos anteriores al cristianismo puede pensar: ¿cómo será que puede establecerse un puente dinámico entre cánticos y danzas?. Pues bien, tome en cuenta primeramente lo que significa, en todas las civilizaciones, absolutamente todas, la palabra como síntesis de concepto. Nombrar es hacer real desde el punto de vista físico. Se dice por ejemplo “campo”, y usted sabe de qué se trata: lugar amplio, generalmente verde, que aporta un sentimiento de calma, etc. Es decir, que una palabra produce una imagen mental y de ahí surgen imágenes complementarias de toda clase: auditivas, olfativas, afloran sentimientos -me gusta, me pone melancólico el atardecer en el campo- … Todo surgió de una palabra muy simple. Esa es la fuerza que proporciona la evocación, el encadenamiento de ideas que redondean un núcleo madre.
Hay frases -en Oriente llamadas mantrams- que asocian los sonidos de manera tal que repetidos una y otra vez, provocan fenómenos de apertura mental y comunicación. Del mismo modo, un “ponto cantado” es una cadena de frases, a menudo simples, que describen un hecho o una cualidad, y que entonadas de manera acertada y en el momento adecuado, hacen de puente entre este plano físico, nuestro plano mental humano y el plano de acción de los elegbaras, que es un grado relativo del plano astral.
Entonces cuando se canta para Eshu o él mismo canta, desenvuelve un registro de puntos de energía que al desplegarse, proyectan un haz de efectos en dos direcciones: por un lado hacia arriba, comunicando planos y llevando la energía a entidades espirituales cada vez más avanzadas; y por otro hacia abajo en torno a nosotros mismos y a las entidades que, aún sin que podamos percibirlas, se encuentran en este nuestro plano, sin poder elevarse por diferentes causas. Con la danza acontece algo semejante. Por ser una actividad liberadora y productora de energía, al ser practicada con espíritu devocional, funciona como conectora, en primer término consigo mismo y luego con los diferentes planos superpuestos de la existencia.
Así, por el efecto doble del canto y de la danza, Eshu se proyecta y efectúa su trabajo principal, que consiste en ser, por sobre toda otra cualquier actividad, un principio dinámico universal, que actúa sobre todas las formas pasibles a ser materializadas. Por eso insistimos al lector que recuerde que todo cuanto se hace efectivo en la existencia de este plano, depende de él, pues es el vehículo del ashe de las divinidades de Dios, podríamos decir sus opulencias, los orisha africanos.
Según la doctrina africanista, Eshu es el único ser creado por Olorun que tiene libre tránsito en todos los sentidos en cualesquiera de los nueve sectores que componen el universo visible e invisible. De ahí su misión de mensajero y guardián de los límites, así como unificador. Si recordamos que, tradicionalmente, los elementos son cuatro, esto es FUEGO, TIERRA, AIRE y AGUA, más las combinaciones de ellos y los estados de transición entre unos y otros, veremos con claridad cuáles son los locales de Eshu y sus diversas funciones.
También los cementerios son puestos de trabajo de Eshu, ya que son límites por excelencia, donde los cambios de la materia se operan bajo su custodia, originando nuevas formas de vida y evolución.
Por todo esto, creemos firmemente en la necesidad de resaltar esta figura que, al principio, nombramos como “controvertida”. Pero aducimos que la controversia tiene mucho de incomprensión y de prejuicio, porque cuando vamos develando su significación en todos los niveles, más claramente podemos gratificarnos de contar con esta energía que nos ayuda en el día a día a desarrollarnos como individuos útiles y a encontrar el sentido de la Creación toda.
Dichoso aquél que cuenta con la amistad y amparo de Eshu, porque se encuentra con un compañero de ruta en el largo y arduo camino de la evolución. Y sin evolución, sólo hay retorno.


Fragmento extraído del libro:
CONTRlBUCIÓN AL ESTUDIO DE ESHU
El principio dinámico de la vida, guardián de los límites, comunicador
Autor: Bàbálórisà Milton Acosta Òséfúnmi

Resistencias y Prejuicios por las Religiones Africanistas

En todo lugar donde los cultos de origen -no de desarrollo- africano se hubieran instalado, se han producido (y aún producen) resistencias, originada más que nada por los prejuicios. Estos prejuicios pueden ser separados en conceptos, por si el paciente lector quiere investigarlos por sí mismo:

a) Religión del esclavo, no del amo. Recordamos y no exentos de indignación, palabras de un conocido jesuita en un programa televisivo: “si los negros hubieran sido tan poderosos, ¿por qué habrían de permitir ser capturados, vendidos y trasladados?”.... Todo dicho. Este buen milite christi vomita su puro racismo defendiendo su propia fe omitiendo el hecho que los primeros cristianos fueron perseguidos y diezmados hasta que tuvieron el buen tino de asociarse al poder, instalándose por secula seculorum. El primitivo cristianismo fue una religión de esclavos romanos, no de los amos, que habían adoptado la religión de los griegos sincretizándola con la de los etruscos y latinos oscos primero y luego importando de sus territorios conquistados cuanta divinidad pudie CONTRlBUCIÓN AL ESTUDIO DE ESHU
-El principio dinámico de la vida, guardián de los límites, comunicador.
Autor: Bàbálórisà Milton Acosta Òséfúnmise ser cultuada en Roma para garantizar la supervivencia del imperio. Recién en 323 el Edicto de Milán eleva la religión de los esclavos a la categoría de religión de los amos y, obviamente pone en entredicho la vieja religión, pasando a perseguir a sus adherentes. Esta amorosa y caritativa práctica de conducir al Reino de Dios, ¿no le provoca al lector ninguna asociación?.

b) Religión de negros. El color negro siempre fue connotado como malévolo por excelencia. Siempre se lo opuso al blanco, color diurno, solar, paternal, creador, benéfico. El negro recalca la noche, lunar, materna, fermental, peligrosa en la medida en que la femineidad es misteriosa. Históricamente los sudaneses de piel negra contribuyeron a fijar los cánones de la religión egipcia a partir de la dinastía XVIII. Las cortes faraónicas cultuaban a sus enéadas divinas en santuarios nubios y lógicamente transculturaban sus respectivas creencias originales. El negro, color de la tierra fértil donde se desenvuelve el misterio de la vida ligada a la semilla sólo se advierte funesto cuando las nuevas sectas patriarcales adquieren predominancia sobre los sistemas tradicionales de culto padre/madre divinos.

c) Satanismo. Toda religión, absolutamente toda, tiende a centralizar el bien supremo en sí misma y el mal en las que compiten con ella. Pongamos por ejemplo: ¿Qué es una herejía? o ¿qué es una secta?. Herejía es una opinión acerca de un dogma - estatuto - que se aparta del cuerpo oficial de creencias. Secta es un desgajarse de personas, seccionadas de un grupo mayoritario por no opinar de la misma forma acerca de un determinado tema dogmático. Los herejes y sectarios por ser minorías han sido consecuentemente atacados, perseguidos y hasta destruídos por los grupos de poder. Hereje fue considerado Galileo Galilei, por afirmar que la Tierra giraba en torno al Sol y no viceversa, que era la posición oficial que interpretaba un pasaje de la Biblia en el cual Josué ordena al Sol detenerse para ganar una guerra. El concepto era que si Josué paró el tránsito del Sol era porque éste giraba, no la Tierra que aparentemente está siempre en su lugar. Sectas son las que se separaron por diferencias mínimas o máximas de las creencias que les dieron origen y reclaman para sí la totalidad de la verdad declarando sin más falsa la causa de su origen.
Pues bien, a medida que un grupo se va escindiendo o se aferra a las tradiciones va estableciendo una diferenciación tal que conlleva a acusarse mutuamente de falsedad o maldad. Qué a menudo la expresión “quien no está conmigo está en contra de mí” produce devastaciones inmensas por intolerancia de todo nivel. La Iglesia Católica, a medida que iba ganando terreno, fue decretando de satánico a todo uso que no ajustara exactamente con su cuerpo oficial de creencias. Pero advierta el lector, que no nació tal como es hoy, por el contrario, concilio tras concilio, sínodo tras sínodo, tuvo que ir depurando su ortodoxia (es decir, “el camino correcto”), censurando y aceptando alternativamente diversas opiniones, tomando lo que era viable y desechando lo contradictorio. Obviamente, aquello que iba quedando fuera, era, sin más trámite, “trabajo de Satanás”. Pero ¿qué o quién es Satanás? . Nos dicen los teólogos que era un ángel, asaz poderoso, que arrastró consigo un enorme contingente de seres espirituales, oponiéndose a Dios. Y esa oposición perdura hasta hoy. Para el judaísmo, Satán es “el tentador”, quien pone a prueba la fe del hombre, pero ni con eso tan opuesto a Dios al punto que en el Libro de Job, ambos de excelente buen humor apuestan por el justo Job, ganando, lógicamente Dios, por ser mayor y porque en definitiva siendo quien creó a los ángeles, hasta los caídos le deben obediencia. Sin embargo esta figura casi humorística de Satanás, presentándose al Padre como para traerle novedades del mundo, terminó siendo el chivo expiatorio de todos los miedos, frustraciones, imágenes arquetípicas y aberraciones que se pudieron encontrar. Los dioses griegos y romanos, demonios de Satanás. Los herejes, demonios de Satanás. Los disidentes, demonios de Satanás. Y cuidado con quienes celebraran las estaciones o continuaran los rituales de fertilidad o amorosos, porque seguramente eran secuaces del demonio, y destruíbles.
A estas alturas el lector ya habrá tomado conciencia de lo que sucedía en las plantaciones americanas cuando sonaba el tambor por la noche -ya que de día el personal esclavo estaba trabajando- seguramente estaban invocando a sus demonios, esos extraños demonios de color negro que vivían en todas partes, que recibían escudillas con comida debajo de los árboles o en los cruces de senderos o en las orillas de los ríos. Y válgame San Pedro de Alcântara, ¿no desapareció ayer mismo un chivo del corral de iaiâ?. Seguro que están llamado al “demo”, al “tiñoso”, al “perro”, al “renegado”, al “rabudo”, al “pie-hendido”, al “gato negro”, etcétera, etcétera. Ni cortos ni perezosos, los africanos aprovecharon el temor servido en bandeja de plata, al menos ese temor les daba un respiro de libertad dentro de su infortunada condición. Pues sí, no vale la pena intentar abrir mentes cerradas que no quieren ser abiertas. Súmese a todo esto el arquetipo de Eshu, que sí estaba claro en los que conocían el fundamento: travieso como un “moleque”, gustador del desborde y los excesos -justamente para dimensionarlos controlándolos- fecundo, multiplicador, fálico, imprevisible, tramposo, sobornable… Afirmamos, sin ningún género de dudas, que fue a propósito identificado con el Diablo por los esclavos y erradamente por los amos, en un juego de poder en el que el débil se hizo fuerte, pero subsiste el prejuicio, avalado por intereses comunes y por el folklore de identificar al demonio con Eshu.

d) Marginalidad. Este prejuicio es a nuestra consideración el más pesado e infamante. Se acusa de marginalidad al pueblo, o más exactamente a una parte de él. Las creencias afrobrasileñas en general y en particular son absoluta y categóricamente las menos marginalizantes y sí totalizadoras, flexibles y heteróclitas de cuantas el lector pudo haberse informado o conocido. Su respeto indeclinable por todo cuanto es propio del ser humano como elemento central de la Naturaleza les proporciona un campo de acción dinámico y esclarecedor al mismo tiempo. Las religiones afrobrasileñas no marginan ni son propias de marginales, si por marginales se entiende a personas diferentes a uno mismo. Diferentes como puede ser un árbol de otro en un bosque, y todos son árboles; o diferentes como una corvina, un lenguado, un tiburón y un carasio, y todos son peces. Diferentes como una rosa, una achira o una glicina, y todas son flores o una pera, una sandía y un níspero, y todos son frutas.

No sabemos y nunca sabremos emitir juicios de ese cariz, como que tal es marginal y cual es fina gente. Ambos son seres humanos, con virtudes y defectos y puede que a nivel de coincidencias en historias de vida estemos a quilómetros. Pero ¿marginal?. Marginal e indecente es lo que ofende al bien común, lo que voluntariamente destruye en vez de construir, marginal es separar en buenos o malos según premisas establecidas por apariencias sin tener en cuenta qué es lo que une en lugar de qué es lo que separa. ¿Dónde iban a prosperar estos cultos sino en las periferias de las ciudades, procurando espacio abierto para no molestar al vecindario con los toques de celebración, con lugar suficiente para criar animales necesarios para homenajear a sus divinidades; para vivir la religiosidad natural en todo su esplendor?. No podemos ni podremos nunca jamás determinar los valores intrínsecos de un sacerdote o sacerdotisa porque resida en el Centro de la ciudad o en Las Torres; o porque su opción de vida -sagrada, personal, inobjetable- esté o no en concordancia con nuestras opciones.

Las creencias no son marginales, y esta acusación hay que refutarla desmarginalizando cada actitud religiosa en cuanto sea posible. Si su Eshu reina en una encrucijada, hágale allí su festejo, arme su mesa con orgullo, porque usted como Él, es libre de hecho y de derecho. Siéntase feliz de tener a su lado un Eshu o una Pombogira, no importa si su achó es cortado por el modista top o lo cortó y cosió con sus propias manos, si en su mesa hay candelabros finos o simples platitos de barro; si usted es conocido o desconocido en el ambiente religioso; si tiene o no tiene casa abierta; si es hetero o gay. Sí importa su devoción, su respeto a lo que hace, su deseo de ser total y definitivamente un buen religioso: abierto, optimizable, amistoso, deseoso de ser cada vez mejor ser humano y sacerdote, celoso guardián de lo mucho o poco que aprendió, positivo, centrado, feliz de dar testimonio en usted mismo, lo que usted recibió de sus entidades y jefes espirituales.

Abra su corazón sin agredir, usted no va a golpear puertas para convencer a nadie que tiene la verdad. Sabemos que la encontró. Valore su verdad. Y muchas verdades pueden contra muchas mentiras. Fíjese que si enciende la radio por la noche y escucha atentamente, va a encontrar un montón de gente que no sabe más que de un solo libro -y lo lee pasando por alto las partes que no le convienen- atacando sin piedad cristiana lo que usted y nosotros creemos. No vamos a inflamarnos de santa ira y arrojar bombas de alquitrán al frente de los templos de estos predicadores. Vamos simplemente a mostrar que para nosotros la Vida, así con mayúscula, es la experiencia más maravillosa que nuestra fe nos proporciona. Levante su bandera y siga. Deje que el tiempo decida mientras su propio milagro lo ilumina.



Fragmento extraído del libro:
CONTRlBUCIÓN AL ESTUDIO DE ESHU
El principio dinámico de la vida, guardián de los límites, comunicador.
Autor: Bàbálórisà Milton Acosta Òséfúnmi

Los Siete Reinos

La Kimbanda está organizada en siete grandes reinos, siendo cada uno de éstos dirigido por Exu Rei y Pombagira Rainha, bajo sus principales siete tipos de presentaciones o pasajes. A su vez, cada reino está compuesto de nueve "pueblos" o agrupaciones de Espíritus que tienen afinidad.

Los reinos que la componen son:

1) Reino das Encrusilhadas

2) Reino dos Cruzeiros

3) Reino das Matas

4) Reino dos Cemiterios (da Calunga Pequenha)

5) Reino das Almas

6) Reino da Lira (do Candomblé)

7) Reino da Praia (da Calunga Grande)


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POVOS DAS ENCRUZILHADAS
1) Povo da Encruzilhada da Rúa.- Jefe Exu Trancarúas
2) Povo da Encruzilhada da Lira.- Jefe Exu Sete Encruzilhadas
3) Povo da Encruzilhada da Lomba.- Jefe Exu das Almas
4) Povo da Encruzilhada dos Trilhos.- Jefe Exu Marabô
5) Povo da Encruzilhada da Mata.- Jefe Exu Tirirí.
6) Povo da Encruzilhada da Kalunga.- Jefe Exu Veludo
7) Povo da Encruzilhada da Praça.- Jefe Exu Môrcego
8) Povo da Encruzilhada do Espaço .- Jefe Exu Sete Gargalhadas
9) Povo da Encruzilhada da Praia- Jefe Exu Mirim.

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POVOS DOS CRUZEIROS
1) Povo do Cruzeiro da Rúa.- Jefe Exu Tranca Tudo
2) Povo do Cruzeiro da Praça.- Jefe Exu Kirombó
3) Povo do Cruzeiro da Lira.- Jefe Exu Sete Cruzeiros
4) Povo do Cruzeiro das Matas.- Jefe Exu Mangueira
5) Povo do Cruzeiro da Calunga.- Jefe Exu Kaminaloá
6) Povo do Cruzeiro das Almas.- Jefe Exu Sete Cruzes
7) Povo do Cruzeiro do Espaço.- Jefe Exu 7 Portas
8) Povo do Cruzeiro da Praia.- Jefe Exu Meia Noite
9) Povo do Cruzeiro do Mar.- Jefe Exu Carunga (Calunga Grande)

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POVOS DOS MATOS
1) Povo das Árbores .- Jefe Exu Quebra Galho
2) Povo dos Parques .- Jefe Exu das Sombras
3) Povo da Mata da Praia.- Jefe Exu das Matas
4) Povo das Campinas.- Jefe Exu das Campinas
5) Povo das Serranías.- Jefe Exu da Serra Negra
6) Povo das Minas.- Jefe Exu Sete Pedras
7) Povo das Cobras.- Jefe Exu Sete Cobras
8) Povo das Flores .- Jefe Exu do Cheiro
9) Povo da Sementeira.- Jefe Exu Arranca Tóco

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POVOS DE CALUNGA PEQUENHA
1) Povo das Portas da Calunga.- Jefe Exu Porteira
2) Povo das Tumbas.- Jefe Exu Sete Tumbas
3) Povo das Catacumbas.- Jefe Exu Sete Catacumbas
4) Povo dos Fornos.- Jefe Exu da Braça
5) Povo das Caveiras.- Jefe Exu Caveira
6) Povo da Mata da Calunga.- Jefe Exu Calunga
7) Povo da Lomba da Kalunga.- Jefe Exu Corcunda
8) Povo das Covas.- Jefe Exu Sete Covas
9) Povo das Mirongas y Trevas.- Jefe Exu Capa Preta (también conocido como Exu Mironga)

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POVOS DE ALMAS
1) Povo das Almas da Lomba - Jefe Exu Sete Lombas
2) Povo das Almas do Cativeiro- Jefe Exu Pemba
3) Povo das Almas do Velório - Jefe Exu Marabá
4) Povo das Almas dos Hospitáis - Jefe Exu Curadó
5) Povo das Almas das Igrejas e Templos - Jefe Exu Nove Luzes
6) Povo das Almas do Mato - Jefe Exu 7 Montanhas
7) Povo das Almas da Kalunga - Jefe Exu Tatá Caveira
8) Povo das Almas da Praia - Jefe Exu Giramundo
9) Povo das Almas do Oriente - Jefe Exu 7 Poeiras

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POVOS DA LIRA
1) Povo dos Infernos - Jefe Exu dos Infernos
2) Povo dos Cabarés - Jefe Exu dos Cabarés
3) Povo da Lira - Jefe Exu Sete Liras
4) Povo dos Ciganos - Jefe Exu Cigano

5) Povo dos Malandros - Jefe Exu Zê Pelintra

6) Povo do Oriente - Jefe Exu do Oriente

7) Povo do Lixo - Jefe Exu da Ganga (también llamado Exu do Lixo)

8) Povo do Luar - Jefe Exu Malé

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POVOS DA PRAIA
1) Povo dos Rios - Jefe Exu dos Rios
2) Povo das Cachoeiras - Jefe Exu das Cachoeiras
3) Povo das Pedreiras - Jefe Exu da Pedra Preta
4) Povo dos Marinheiros - Jefe Exu Marinheiro
5) Povo do Lodo - Jefe Exu do Lodo
6) Povo do Mar - Jefe Exu Maré
7) Povo dos Bahianos - Jefe Exu Bahiano
8) Povo dos Ventos - Jefe Exu dos Ventos
9) Povo da Ilha - Jefe Exu do Coco

Expuesto por Adri-Cel

Cómo Evoluciona Eshú.

Bibliografía: CONTRlBUCIÓN AL ESTUDIO DE ESHU
El principio dinámico de la vida, guardián de los límites, comunicador.
Autor: Bàbálórisà Milton Acosta Òséfúnmi



Para que Exu quer casa
Se trábala sob a lua?
Exu não tem parentes,
Então mora na rua
(Curimba carioca)


COMO EVOLUCIONA ESHÚ

Hemos recalcado suficientemente que el elegbara es evolutivo. Por ende, cada paso que da es, por lógica, un avance en su crecimiento espiritual. Va subiendo, por así decirlo, una ladera de montaña paso a paso, hasta que llega a un plano de identificación total con su misión.
El desenvolvimiento de estas etapas consiste en un aprendizaje dirigido convenientemente con miras a llegar al punto de partida de tal camino evolutivo, comenzando por el momento en el cual la entidad -utilizando la prerrogativa de ser dueño y esclavo de su palabra, que es ley- habla acerca de sí mismo y diseña un conjunto de símbolos que sellan de algún modo el compromiso de aceptar su misión en esta tierra.
Esto se conoce como "ponto riscado". Dibuja el despliegue visible y mágico de su tarea, como una especie de carné de identidad que luego será llevada al metal para la segunda etapa.
Segunda etapa: Esta fase es el asentamiento, la ordenación material de los elementos dispersos que lo componen: armas, bultos, etc. Ahí se asienta su páredro/a porque no se concibe nada que pueda actuar sin su par complementario.
En este período comienza a valorizar la importancia de la primera faca, para poder efectuar en los reinos afines los servicios que sean precisos.
La segunda viene luego, junto al permiso de poder moverla dentro de la Aruanda.
La tercera es la siguiente en un orden, e implica que ese' Eshu está capacitado suficientemente para dar su comida a otros elegbaras que así se lo solicitaran, siempre atentamente observado y encaminado por su jefe en la Ley.
Finalmente, ya prácticamente en la meta, es autorizado a alimentarse por sí mismo si así lo deseara ó necesitara: esto se conoce en medios religiosos como "liberación", pero no necesariamente( significa rompimiento o repulsa. Simplemente el Eshu, a juicio de su iniciador, alcanzó la mayoría de edad, y está en el momento propicio de organizarse sin ayuda)

Primera etapa -Elebó de pluma- (gana quartinha y guía)

Segunda etapa -Elebó de asiento- como lo dice la propia definición, se asienta la energía con sus elementos, y obviamente, en cuatro pies.

Las próximas etapas han sido ya mencionadas en este mismo ítem, de modo que ahorramos al lector la repetición.

La guía imperial de Eshu varía considerablemente de casa en casa, y también, por qué no decirlo, de acuerdo al pedido del propio elegbara que la quiere de talo cual hechura. Generalmente tiene siete piernas y nueve pasajes.
Como es posible apreciar, la Kimbanda no es un culto satánico porque se desprende como un fruto maduro de un árbol en el que no hay concepto de Mal en sí mismo. Malo es lo que nos daña, bueno lo que nos gratifica. Y partiendo de la básica ley del eterno retorno, el hombre actúa con su libre albedrío en plenitud. Lo que siembre cosechará, inexorablemente, más tarde o más temprano. El culto a Eshu, la ley ritual de Kimbanda o La adopción del mensaje de Eshu desde el Alto Astral es un apasionado himno de libertad y respeto.

Quien no evoluciona -pero cuidado que evolución no tiene nada que ver con ganar plata fácil estafando- debe haber descuidado la relación íntima, plena y total con su compadre Eshu. De otro modo, jamás existiría la carencia. La Kimbanda promueve el aprovechamiento para crecer y evolucionar dentro de los límites de la materia, desde la más densa hasta la más sutil.
Es un canto a la vida, a la solidaridad, a la justicia.
Un sistema que aporta reserva de luz interior para cuando nos toque penetrar en el pasillo oscuro de lo desconocido. Y allí Eshu es guardián y guía.

Laroye Esú! .
Elubande!
Adúpe oremi olona!

Exú - Descripción


Exú

(Aclaramos, que cuando hablamos de alguna encarnación de un determinado Exu, eso no indica que hace alusión a todos los que se presentan con ese nombre, sino que se trata de un caso específico con el cual hablamos. Los Exu que llegan en los médiums son personales, por lo tanto, sus vivencias y encarnaciones son únicas. Deben sí, tener algo en común con la falange a la que representan y además poseer una base sólida.)
Los EXU reciben la misma consideración y el mismo respeto que los Orixás. Si los Orixás son el Legislativo del Astral, los EXU forman el Ejecutivo y ambos el perfecto equilibrio. Exu es Egun, Orixa no lo es.
Dios creó el mundo, buscando en todo la perfección. Para que pudiesen aquilatar su perfección, fue establecida por Dios la dualidad. La Quimbanda tiene siete Líneas cada una con un Orixás jefe. Cada Línea es compuesta de siete Falanges, cada Falange es compuesta de siete Sub-Falanges, cada Sub-Falange compuesta de siete Grupos y cada Grupo compuesto de siete Bandos. Cada Línea es compuesta de siete Falanges, existiendo en ella el Jefe supremo de la Línea y además los siete jefes de Falanges correspondientes a las siete Falanges existen en la Línea. Cada Falange es compuesta de siete Sub-Falanges, o sea el jefe de la Falange y además los siete jefes de las Sub-Falanges. Cada Sub-Falanges es compuesta de siete Grupos, el jefe de la Sub-Falange y los siete jefes de los Grupos. Cada Grupo es compuesto de siete Bandos, el jefe del Grupo y los siete jefes de los respectivos Bandos. Así, cuando precisamos del auxilio de alguna entidad del Reino de los Exus, debemos recurrir al Alto comando, o a los jefes de Líneas, pues de este modo estaremos protegidos por millones de Exus de nuestro lado. Kimbanda: término angolano, con el cual se designa al supremo sacerdote, proveniente de la lengua Bantú, estos individuos tenían la función de evocar a los espíritus de curación.

Quimbanda: significa Sacerdote Curador.

Esú: Es una palabra Yorubá que significa esfera, movimiento perfecto, por cuanto todos los puntos de la esfera equidistan del centro, energía cósmica en movimiento, agente dinámico catalizador y productor de reacciones.

Mas Quién Es Exú ?

El Orixá telúrico, ejecutor de la Justicia kármica, guardián de la magia, intermediario entre los hombres y los Orixás. Exu no es bueno ni ruin ; cumple una función de regulador; es el termómetro de las condiciones astro-físicas del planeta. Todo lo emocional, todos los instintos, todas las pasiones son manipuladas por los Exu: esas son sus demandas. EXU NO ES BUENO NI MALO, ES JUSTO.

Cual Es El Campo De Actuación Del Exú?

Los Exus actúan como ejecutores de la Ley, encima de los conceptos del Bien y del Mal, por eso, son llamados Exus de Ley, por actuar como agentes de la Justicia kármica, y como tal, espíritus responsables, conscientes de sus funciones y jurisdicciones. No son los Exus quienes hacen la Ley, ellos apenas las cumplen ejecutándolas en nivel planetario.

Como El Exú Trabaja ?

Exu gusta de reír, jugar con las personas, más no por eso su trabajo no es serio. Gusta de beber y fumar, al contrario de lo que muchos piensan, en nada influencia el trabajo de los Exu. La bebida y el cigarrillo son elementos de aproximación, haciendo con que las personas se identifiquen, estando mas descontraídas como si estuviesen en una fiesta. Caso no tenga bebida o cigarro, el Exu trabaja del mismo efecto, pues, su finalidad es apenas ayudar aquellos que el procura. En su trabajo el Exu corta demanda, crea condiciones de éxito, des hace trabajos, feitiços y de magia negra. a veces temido, a veces amado, mas siempre alegre, honesto y combatiente de la maldad del mundo. ESTE ES EL EXU!!!

Los Exú en la Kimbanda

Son entidades espirituales las más allegadas al plano terrenal, con las costumbres y vicios, humanas condenadas a vagar por el espacio, surgen en Umbanda como los "Exus", donde por lo general aparecen como "almas sufridoras", que deben ser adoctrinadas, lo que revela una influencia muy fuerte del espiritismo Kardecista. Las manifestaciones de dichas entidades se producen en ceremonias o sesiones las cuales son denominadas, de "kimbanda o línea roja". Tanto el Exu (hombre) y Pombagira (mujer) dependen de sus respectivos jefes de legiones y falanges, las mismas supervisadas por "Bará" (San Antonio en el sincretismo religioso).Según la mitología Gege-nago, Exu era el nombre propio de un Orixá (Eshu), ayudante y compañero de Omulú, señor de la peste, de la viruela y de la muerte. En kimbanda, Exu Caveira, Exu Ganga, Exu das sete Cruces, Exu Tirirí, Exu Capa Preta, o en la manifestación femenina Exu Maria Padilha, Exu Sete Saias, Pombagira das Almas, Exu Cigana, Exu Maria Mulambo, - para citar los más populares -, siguen siendo colaboladores de Omulu, esto es, de un Orixá. Durante algunas visitas realizadas a casas de religión muchas veces he escuchado de mis propios colegas o mismo gente asistente a sesiones el siguiente comentario: las entidades de línea blanca de Umbanda (caboclos) son buenas, pero las entidades de línea roja (Exus) son malos, este es un punto que se deberia aclarar, para ellos un espíritu es bueno si no es "hostil" a los hombres, "malo" si lo es. Exus, según enseñan las tradiciones y experiencias, son hostiles, pueden hacer daño: de ahí su "maldad", porque un Exu bien adoctrinado, con un médium encaminado correctamente dentro de las leyes religiosas, puede ser la herramienta más eficaz para la ayuda de aquel feligrés que se acerca a consultar a estas entidades por problemas materiales o espirituales.
Estas entidades, expertas en realizar o desmanchar trabajos de brujería o magia negra, cultuado por toda casa abierta de cultos afro-americanos, defensor y custodia del terreiro (templo), generalmente ubicado en la entrada principal donde se le ofrendan velas, puros, bebidas y comidas. Las ofrendas a ofrecerles según sea su afinidad y el Exu con el que estemos ofrendando, puede ser desde la orilla de un río, en el cementerio, una encrucijada, monte, selva, etc., etc.
Si una persona acude a los Exus "para hacer el mal", no habrá umbandista que no afirme que eso es pecado, un pecado que deberá ser necesariamente purgado kármicamente.

Al contrario de lo que se piensa, los exus no son los diablos ni espíritus malignos o inmundos que algunas religiones rezan, tampoco son espíritus endurecidos u obsesores que un gran número de espiritas creen.
Los diablos o demonios, son seres mitológicos, ya desechados por la doctrina espirita, por lo tanto no existen.
Los espíritus obsesores, son espíritus que se encuentran fuera de la Ley. Provocan los más variados disturbios morales y mentales en las personas encarnadas, desde pequeñas confusiones, hasta las más duras y tristes obsesiones. Son espíritus que se complacen en la práctica del mal, por sentir placer por hacer el mal en si mismo, o por sentir un odio profundo por todas las cosas.

Aturden, así mismo, que la Ley los recupere de la mejor manera posible, voluntaria o involuntariamente.
Son conocidos por los umbandistas, kimbandistas, etc., como kiumbas o quiumbas.
Moran en el bajo astral, donde las vibraciones energéticas son densas.
Este bajo astral, es un enorme caldero formado por los bajos sentimiento, pensamientos, actitudes, de los espíritus de los espíritus encarnados y desencarnados. Sentimientos bajos, bajas pasiones, odios, rencores, envidias, rabias, venganzas, sensualidad desenfrenada, vicios de toda estirpe, alimentan esta faja vibracional y los kiumbas se complacen en ellos, ya que se sienten mas fortalecidos.
El bajo astral, tiene diversas organizaciones, fuertemente esquematizadas y jerarquizadas. Planos bien elaborados, mentes prodigiosas, tácticas de guerrilla, precisiones quirúrgicas, ejércitos bien pertrechados y entrenados, componen los cuadros de estas organizaciones.
Muchas de esta, se encuentran en la plena certeza de que cumplen los designios de la Ley Divina, donde confunden la Ley de Acción Reacción con el "ojo por ojo, diente por diente". Se vengan pensando que hacen las cosas correctas.
Otras hacen el mal por el mal mismo, sabiendo que están contra la Ley, llevando en sus mentes el odio hacia toda la Creación, no dándoles tregua a sus enemigos. Creen que la Ley de acción reacción no se volverá en contra de ellos mismos.
Cada acción maléfica practicada por un espíritu, lo hunde cada vez más. Las caídas son frecuentes y provocan más y más frustración realimentando su odio.Algunos espíritus caen tanto que pierden la conciencia humana, transformándose (o plasmando) en sus cuerpos astrales (periespíritos) en verdaderas fieras, animales, bestias e asi son usados por otros espíritus como tales. Algunos se transforman en lobos, canes, cobras, lagartos, aves, etc. Otros espíritus llegan al máximo de la caída hasta pierden sus características humanas, transformando sus periespíritos en ovoides. Esta caída, provoca además de la perdida de energía, la perdida de la conciencia.

Quedan también subyugados por otros espíritus.
A pesar de todo este cuadro, poco esperanzador, de las intrigas, aún sabiendo que en nuestro orbe el mal prevalece sobre el bien, está también el lado de la Luz, de la Ley, del Bien, en este lado todo es más organizado que las organizaciones de las intrigas.

Específicamente, en Umbanda, vemos a través de las Siete Líneas, varios Orixás jerarquizados. Existen varios niveles en la jerarquía de los Orixás. Comenzando por los mas altos espíritus, que están próximos del Creador, hasta los Orixás Menores o Planetarios (aquellos que están ligados y responsables por cada orbe, por su evolución).

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